Amelie

Película reconfortante de personajes que no hieren, cargada de buenos sentimientos, como si de un cuento Navideño se tratara. Un guión hilarante, con unos protagonistas muy acertados, un cuento agradable, en el que la maravillosa y dulce Amelie es capaz de exteriorizar su personal mundo interior a cuantos le rodean.

Amelie

Esta comedia dramática supuso todo un acontecimiento el año de su estreno, en 2001, esto y el hecho de que el film de Jean-Pierre Jeunet le llegó al corazón fue suficiente para que Maria eligiese esta obra para su inspiración.

Habitación que recuerda los aires franceses por sus colores, mobiliario y algunos detalles como los cuadros del perro y el ganso que hablan entre ellos o uno de los enanitos que pueden, quizá, sorprenderle dentro de la estancia.

Película reconfortante de personajes que no hieren, cargada de buenos sentimientos, como si de un cuento Navideño se tratara. Un guión hilarante, con unos protagonistas muy acertados, un cuento agradable, en el que la maravillosa y dulce Amelie es capaz de exteriorizar su personal mundo interior a cuantos le rodean.

Amelie tiene su mundo propio, disfruta de cosas sencillas, es atenta y observadora, viendo lo que otros no ven. Su especial forma de ser, la cual mueve a abrazarla, nos deja escenas de fábula; las fotos del gnomo viajero por todo el mundo, las conversaciones entre el tendero y su ayudante. Las charlas en el café de Montmartre donde Amelie trabaja como camarera, con una retahíla de personajes pintorescos; el ex-marido obsesivo, la hipocondríaca enamorada, la jinete circense despechada, el escritor frustrado, conforman una gama de personajes únicos e irrepetibles que nos hacen reír con sus desventuras y ocurrencias.

Reservar ahora